El estilo nunca muere
SIN PRETENDERLO INICIALMENTE, el Mini se convirtió desde su lanzamiento en un coche con mucho estilo. Querían venderlo como un modelo sencillo y barato y se dieron cuenta de que, a diferencia de lo que estaba previsto, no lo compraban mayoritariamente clientes de posición social baja y media. La llegada del primer Mini de la era BMW en 2001 también demostró algo muy interesante: un coche pequeño también podía ser premium. Después muchas otras marcas se animaron a lanzar modelos pequeños pero lujosos y muy equipados.
El Mini original fue uno de los pocos automóviles que, como el Citroën 2 CV, el Volkswagen Escarabajo o el Seat 600, se convirtieron en fenómenos sociales. Pronto se estableció como un icono de Gran Bretaña y en un coche deseado por los personajes más importantes de la época. Steve McQueen o Peter Sellers que se mató en 1977 al volante de su Mini Cooper cuando volvía de una fiesta. Y nuestro Julio Iglesias sufrió en 1962 un grave accidente en el suyo, cuando era una joven promesa como portero en el Real Madrid.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos