LA PUERTA DEL DESIERTO
Bienvenido a la última ciudad antes de adentrarte en el desierto nigerino del Teneré, parte del Sahara. Desde su origenAunque el asentamiento tuareg tenía cuatro siglos de vida, pronto se consolidó como el más importante del sultanato de Aïr, en 1449; 51 años más tarde, sería conquistado por el Imperio Songhai por casi un siglo, antes de ser recuperado por los tuaregs. Esto no impidió que una construcción se embelleciera con un minarete de adobe, en 1515, regalo de un tal jeque Zakariya –cuya existencia es incierta– para convertirla en la mezquita más importante de la ciudad. Pese a la invasión marroquí y posteriormente francesa, su valor es tal que se restauró en 1844 y continúa intacta hasta nuestros días. Dos oratorios, patios internos, una tumba y un cementerio se agregaron a este edificio de adobe considerado el más alto del mundo gracias a su minarete en forma de pirámide trunca, cuyos 27 metros de largo son atravesados por estacas de madera que le dan su apariencia característica.
