El CASO de Kimberly Karen Mota de Oliveira fue una joven repleta de sueños y que siempre hizo todo lo que estaba a su alcance para cumplirlos. Por otro lado, su carisma y su constante energía hacían que fuera una persona querida por todos sus allegados.
Con tan solo 22 años ya había logrado convertirse en un ejemplo para las chicas de la ciudad de Manicoré que deseaban incursionar en el mundo del modelaje. Además, Kimberly siempre las estimulaba pidiéndoles que lucharan cumplir sus objetivos. Nunca se creyó más que nadie y hasta se animó a abandonar su ciudad para convertirse en odontóloga.
Kimberly podía haber logrado todo lo que se propuso pero confió en la persona equivocada.
La muerte de Kimberly Mota se suma a la innumerable cantidad de femicidios que, lamentablemente, recuerdan todos los recaudos que hay que tomar ante los comportamientos posesivos, controladores y violentos de un hombre, que pueden llegar a los extremos más macabros y brutales.
“Él dice que ella fue al baño. En ese momento, dejó su teléfono celular en la cabecera. Sabía la contraseña y vio algunos mensajes que lo molestaron. Fue a la cocina, escondió un cuchillo en la espalda, al regresar ella se tumbó a su lado en la cama.”Distribuido por Genuina Media