La polarización se traslada a un choque entre el Senado contra el Congreso a cuenta de la ley de amnistía. El PP ha modificado unilateralmente el reglamento de la cámara alta y pone un criterio de inconstitucionalidad para evitar la tramitación de la ley, aunque el Senado no puede hacerlo. El PP sabe que la última palabra legislativa la tiene siempre el Congreso. Y el ambiente electoral. Cataluña asiste a una competición entre partidos independentistas por ver quién queda en mejor posición para la composición del futuro gobierno. ERC lleva la delantera en propuestas que no se pueden aplicar, pero puede que les sirva para mejorar sus resultados frente al actual protagonista, Carles Puigdemont.