En EE.UU. pusieron el cadaver de un rapero para su "último show" mientras banean a Will Smith de los Oscars. También se publicó una lista de palabras prohibidas en Amazon y se anunció que habrá más horas de escuela.
Le dieron el Grammy a mejor disco al año siguiente de ganar un Oscar por Soul. Jon Batiste abandonó el tema del prestigió alejándose del jazz para acercarse a la música negra comercial, pegadiza y alegre de We Are.
Matías Galarraga nos trajó una historia interesante sobre una serie de eventos que desembocó en la muerte comercial de la música disco. El enojo de un locutor dedicado al rock, el racismo como mensaje subyacente y un partido de Baseball que podría haber terminado en desastre.
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