Desarrollo Personal: La psicología del placer, disciplina emocional, como cambiar los malos hábitos, la adicción a la dopamina, la procastinación, y la fuerza de voluntad.

Creemos que un mal hábito es algo normal y que no debemos alarmarnos, pero un mal hábito que persigue placer y reprime el desarrollo de la habilidad de "privarse de algo" puede convertirse en una adicción si no eres capaz de controlarlo.

En el s.XXI tenemos a nuestro alcance una infinidad de fuentes de placer corto-placista que nos aumentan nuestros niveles básicos de la hormona del placer, la dopamina.
Con estos niveles tan altos, podemos sentirnos vacíos, frustrados, miserables y deprimidos a menos que nos premiemos y estimulemos con nuevos placeres, lo cuál si lo piensas se asemeja mucho a los síntomas de la adicción.

Esto a simple vista puede parecer extremo... "¿Zardoya, qué eres un perro ahora, sólo te das placer si das la patita y te sientas?"...
Pues la respuesta es que como quiero llevar mi productividad y la consecución de mis objetivos a una nueva dimensión, te diré que SÍ.

En este vídeo te explico como recientemente he subido brutalmente mis niveles de dopamina no pudiendo así controlar mis impulsos primitivos de supervivencia: comer, beber, dormir...
Cosas que individualmente no hacen nada, pero que todas juntas y en exceso sí que te alejan de tus objetivos.

Un mal hábito no es lo mismo que una adicción. Mirar 250 veces diarias la pantalla de nuestro móvil no puede ser un hábito, porque llevamos años tratando de controlarlo, y no hemos podido.

Prometernos hacer algo y no hacerlo, nos hace perder confianza en nosotros mismos. Perdemos fe en nosotros mismos y nuestra palabra ya no vale nada.

Llegar a esta realización me cambió en su día la vida y espero que también pueda cambiar la tuya.
Si encuentras algo de valor en mis vídeos por favor comparte. Juntos podemos cambiar vidas