Una hermana testifica que Dios hizo una sanidad en ella; y la hermana testifica que oraba por sus jefes quienes son personas adultas mayores, a través de los cuales ella se contagió del Covid-19.
Sus jefes quienes practican otra religión; sin embargo la jefe llamó a la hermana a contarle que el Viernes pasado tuvo un sueño, en donde aparecía una enfermera y le decía “Mi padre me envió porque hay alguien pidiendo por ti, por lo tanto Él me envía…” le aplicó una inyección y al despertar se sintió aliviada de todos los síntomas.
Al contarle la experiencia, la hermana le envió una fotografía de nuestra hermana María Luisa a su jefe, a lo que esta persona asombrada le preguntó “¿Cómo es posible que sepas que se trata de la misma mujer que vi en el sueño?” y se asombraba que aún la misma ropa que luce en la fotografía, la traía puesta en el sueño debajo de una bata blanca.
Fue la oportunidad para evangelizar a sus jefes y darles a conocer el valor que representa nuestra hermana María Luisa.
Ellos desean conocer la Iglesia para agradecer a Dios por este prodigio. Gloria a nuestro Rey y Señor.
Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional.