4 min de escucha
Lucas 6, 20-26
Lucas 6, 20-26
valoraciones:
Longitud:
2 minutos
Publicado:
13 sept 2023
Formato:
Episodio de podcast
Descripción
Las Bienaventuranzas en Lucas
1) La preocupación: La preocupación nunca cura nada, pero te roba la vida y el tiempo y la mente. Por tanto, mira estas bienaventuranzas pero también mira tu fragilidad y lo frágil que es tu vida. Toma todo en serio, menos el ser agradado por los demás y ese sentir la necesidad de ser agradados por todos y en todos. No huyas de nada ni de ti mismo. Aprende a aceptarte y aceptar tu realidad que hoy te toca vivir y sin estar mirando de reojo el pasado hermoso que te tocó y sin mirar con ilusiones el futuro que ni siquiera empezó. Disfruta de la experiencia de la Vida (Dios) incluso en las desgracias. No hay día, sea el que sea, que no merezca ser vivido. Hoy sos bienaventurado porque late tu corazón y tenés vida.
2) Dejar de lado: Todo tiene su tiempo y es por eso que lo más inteligente que podés hacer en tu vida y por tu vida es saber “marcharte a su debido tiempo”. Saber ponerte límites… No hay nada más inteligente y bienaventurado que marcharse a tiempo de las cosas, de lo que sea: de algo que sabes que se acaba, de una fiesta que empieza a ponerse peligrosa, de una adiccion que nos esclaviza, de un trabajo que nos desespera. Es saber ponerte límite y salir de todo: aquella persona, lugar o cosa que nos amarga, nos corta las alas y no nos deja vivir ni llegar a Dios.
3) Falsos: Siempre habrá en tu vida y alrededor de tu vida personas que con falsedad actúan en vos y sobre vos. Por eso, cuida tu prudencia. Fíjate bien a quién le contás tus cosas y no le regales tu presencia a aquel que ni siquiera considera tu ausencia. Más bien busca tu presencia en Dios y estar con Él. Ser bienaventurado es saberte limitado y confiado en Dios. Sabiéndote necesitado, serás en Dios completado. Sintiendo tu nada, en Dios encontrarás todo. ¡¡¡Búscate!!! Algo bueno está por venir.
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Support this podcast: https://podcasters.spotify.com/pod/show/misioneros-digitales-catlicos/support
1) La preocupación: La preocupación nunca cura nada, pero te roba la vida y el tiempo y la mente. Por tanto, mira estas bienaventuranzas pero también mira tu fragilidad y lo frágil que es tu vida. Toma todo en serio, menos el ser agradado por los demás y ese sentir la necesidad de ser agradados por todos y en todos. No huyas de nada ni de ti mismo. Aprende a aceptarte y aceptar tu realidad que hoy te toca vivir y sin estar mirando de reojo el pasado hermoso que te tocó y sin mirar con ilusiones el futuro que ni siquiera empezó. Disfruta de la experiencia de la Vida (Dios) incluso en las desgracias. No hay día, sea el que sea, que no merezca ser vivido. Hoy sos bienaventurado porque late tu corazón y tenés vida.
2) Dejar de lado: Todo tiene su tiempo y es por eso que lo más inteligente que podés hacer en tu vida y por tu vida es saber “marcharte a su debido tiempo”. Saber ponerte límites… No hay nada más inteligente y bienaventurado que marcharse a tiempo de las cosas, de lo que sea: de algo que sabes que se acaba, de una fiesta que empieza a ponerse peligrosa, de una adiccion que nos esclaviza, de un trabajo que nos desespera. Es saber ponerte límite y salir de todo: aquella persona, lugar o cosa que nos amarga, nos corta las alas y no nos deja vivir ni llegar a Dios.
3) Falsos: Siempre habrá en tu vida y alrededor de tu vida personas que con falsedad actúan en vos y sobre vos. Por eso, cuida tu prudencia. Fíjate bien a quién le contás tus cosas y no le regales tu presencia a aquel que ni siquiera considera tu ausencia. Más bien busca tu presencia en Dios y estar con Él. Ser bienaventurado es saberte limitado y confiado en Dios. Sabiéndote necesitado, serás en Dios completado. Sintiendo tu nada, en Dios encontrarás todo. ¡¡¡Búscate!!! Algo bueno está por venir.
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Publicado:
13 sept 2023
Formato:
Episodio de podcast
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