5 min de escucha
Juan 15, 18-21: Conocer es encaminar hacia
Juan 15, 18-21: Conocer es encaminar hacia
valoraciones:
Longitud:
3 minutos
Publicado:
13 may 2023
Formato:
Episodio de podcast
Descripción
1) El mundo: Implica este acelere de vida. El predicar a Jesús hoy también implica que te rotulen, te critiquen y hasta te calumnien. Algo que siento que nos pasa hoy es que nos ponen a todos en la misma bolsa. Basta que diga que soy sacerdote para que digan muchos “ah son pedófilos”; o que seas de la parroquia para que digan “perteneces a esa institución que está llena de dinero”. Claro que es triste y doloroso, porque si bien mostramos todo lo trabajado y sanado, porque hay que aceptar que también como Iglesia (institución) cometimos errores, parece que no basta en este mundo. Pero hay que recordar que estamos para agradar a Dios y no a este mundo, porque si Jesús, siendo Dios, tenía gente que lo criticaba y destruía, cómo no lo van a hacer con vos o conmigo.
2) Los elegí: Es tu vida espiritual lo que te cambia. Es tu mirada de la vida lo que te hace distinto o distinta. Es tu actitud ante las dificultades la que te cambia. Es tu forma de poner esperanza a cada día lo que te hace pleno, pero te lleva a ganarte también enemigos. Es por eso por lo que, aunque te tiren palos, te invito a seguir; y si te equivocas, pedí perdón, pero seguí. No dejes que nada ni nadie te detenga, porque en este mundo buscarán detenerte o por ser distinto o por envidia. Pero aquí jugátela, porque tenés el amor de Dios y si hay algo que debes recordar siempre es tu experiencia de fe. Trata de volver siempre a aquella vez que sentiste algo interno que te movió. Volvé a ese primer amor.
3) Conocer: Este amor a Dios te hace crecer en el conocimiento de Él, porque nadie ama lo que no conoce. Es por eso que siempre te invito a que leas la palabra de Dios, que visites al Santísimo, que no dejes el Rosario o la formación con el catecismo o con lectura espiritual. No dejes de conocer a Dios, porque el conocerlo es algo dinámico y no estático. Cuando inicias el camino de conocerlo nunca terminas. Yo día a día estoy aprendiendo a conocer de Jesús y esto me enamora más de Él, aunque no te niego que en cada caminar hay más piedras grandes, que lucho por no tropezar, porque las tentaciones y las piedras están. Pero si me tropiezo y caigo, ayúdame a levantar, porque no puedo solo. Porque yo también te voy a ayudar. Esta es la diferencia que tenemos vos o yo con el mundo: al que cae se lo termina de matar. En cambio nosotros, los cristianos, vamos a levantarlo y lo vamos a ayudar a resucitar. ¿Te prendes a esta experiencia, a esta actitud? Algo bueno está por venir.
---
Support this podcast: https://podcasters.spotify.com/pod/show/misioneros-digitales-catlicos/support
2) Los elegí: Es tu vida espiritual lo que te cambia. Es tu mirada de la vida lo que te hace distinto o distinta. Es tu actitud ante las dificultades la que te cambia. Es tu forma de poner esperanza a cada día lo que te hace pleno, pero te lleva a ganarte también enemigos. Es por eso por lo que, aunque te tiren palos, te invito a seguir; y si te equivocas, pedí perdón, pero seguí. No dejes que nada ni nadie te detenga, porque en este mundo buscarán detenerte o por ser distinto o por envidia. Pero aquí jugátela, porque tenés el amor de Dios y si hay algo que debes recordar siempre es tu experiencia de fe. Trata de volver siempre a aquella vez que sentiste algo interno que te movió. Volvé a ese primer amor.
3) Conocer: Este amor a Dios te hace crecer en el conocimiento de Él, porque nadie ama lo que no conoce. Es por eso que siempre te invito a que leas la palabra de Dios, que visites al Santísimo, que no dejes el Rosario o la formación con el catecismo o con lectura espiritual. No dejes de conocer a Dios, porque el conocerlo es algo dinámico y no estático. Cuando inicias el camino de conocerlo nunca terminas. Yo día a día estoy aprendiendo a conocer de Jesús y esto me enamora más de Él, aunque no te niego que en cada caminar hay más piedras grandes, que lucho por no tropezar, porque las tentaciones y las piedras están. Pero si me tropiezo y caigo, ayúdame a levantar, porque no puedo solo. Porque yo también te voy a ayudar. Esta es la diferencia que tenemos vos o yo con el mundo: al que cae se lo termina de matar. En cambio nosotros, los cristianos, vamos a levantarlo y lo vamos a ayudar a resucitar. ¿Te prendes a esta experiencia, a esta actitud? Algo bueno está por venir.
---
Support this podcast: https://podcasters.spotify.com/pod/show/misioneros-digitales-catlicos/support
Publicado:
13 may 2023
Formato:
Episodio de podcast
Títulos en esta serie (100)
Mateo 25, 31-46 de Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano