7 de febrero | Nueva YorkHola, maricoper. No es el último capítulo.Leer esta newsletter te llevará 10 minutos y 24 segundos.Do your part. Bienvenido a La Wikly.Lo importante: el presidente estadounidense Joe Biden anunció este pasado jueves la muerte de Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurashi, líder del Estado Islámico (ISIS). Según la Casa Blanca, se inmoló después de que fuerzas especiales de Estados Unidos rodearan la casa del noroeste de Siria en la que se alojaba con su familia.Contexto: la muerte de al-Qurashi es el último episodio en la lucha contra el Estado Islámico, un grupo terrorista aferrado a la supervivencia que sigue protagonizando ataques y pequeñas incursiones armadas pese a que ya han pasado varios años desde su mayor apogeo en Siria e Irak.Justo estas semanas, fuerzas kurdas sufrieron numerosas bajas intentando recuperar una prisión repleta de cientos de combatientes de ISIS en el noreste de Siria.Explícamelo: los restos de ISIS están dispersos por regiones remotas y desérticas del este de Siria y el oeste de Irak, pero la muerte de al-Qurashi se produce en un momento clave en el que el grupo terrorista planeaba una vuelta de los bajos fondos.En esta newsletter, vamos a explorar qué ha sido de ISIS en estos últimos años, qué planeaban para el futuro y qué significan las noticias sobre la prisión y sobre la muerte de al-Qurashi que hemos conocido estas últimas semanas.? El califato perdidoEl Estado Islámico, también conocido como ISIS, ISIL o Daesh, surgió de los remanentes de una rama local de Al Qaeda en Irak (AQI). Se mantuvieron con una actividad mínima tras el aumento de tropas estadounidenses en Irak de 2007, resurgiendo en 2011.A partir de entonces, el grupo aprovechó la creciente inestabilidad de Irak y Siria para llevar a cabo ataques y anexionar territorios de ambos países. En 2013, cambió su nombre a Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS).El entonces líder de ISIS, Abu Bakr al Baghdadi, anunció en 2014 la formación de un califato que se extendía desde Alepo, en Siria, a Diyala, en Irak. En su momento álgido, el Estado Islámico lograba controlar alrededor de un tercio de Siria y el 40 por ciento de Irak.En agosto del mismo año, una coalición liderada por EE. UU. inició ataques aéreos contra ISIS en Irak que a lo largo del año siguiente se extendieron también a Siria y alcanzaron la cifra de más de 8,000.Para finales de 2015, las fuerzas del gobierno iraquí apoyadas por EE. UU. habían logrado recuperar numerosos territorios, incluyendo la ciudad de Ramadi. ISIS logró mantener el control en Siria con ciudades como Raqqa bajo su poder, aunque sufriendo pérdidas clave en la frontera norte con Turquía.El 9 de diciembre de 2017, el entonces primer ministro iraquí, Haider al Abadi, declaró la victoria sobre el Estado Islámico en Irak. En ese momento, ISIS había perdido el 95 por ciento de su territorio, incluida Raqqa, su capital nominal en Siria.Pese a esta drástica reducción del territorio bajo su control, ISIS seguía inspirando temor, principalmente por los ataques perpetrados en diversas parte del mundo, incluida la ciudad de Nueva York.El foco de la campaña contra ISIS en 2018 estuvo protagonizado por las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), una coalición de árabes sirios y kurdos que gracias al respaldo de EE. UU. logró capturar gradualmente posiciones clave del Estado Islámico.Para finales de ese año, el entonces presidente estadounidense Donald Trump declaró que ISIS había sido derrotado y anunció intenciones de retirar las tropas estadounidenses que se encontraban en Siria apoyando a las SDF.El asedio final de las SDF contra el Estado islámico fue en febrero de 2019, cuando atacaron las aldeas restantes que se concentraban en Baghouz, una pequeña población en pleno río Éufrates cerca de la frontera este de Siria con Irak.En octubre de ese mismo año, al-Baghdadi finalmente murió tras ser acorralado por una redada estadounidense en el norte de Siria y detonar una bomba que terminó con su vida.? Lo que qued