La pregunta que muchos nos hacemos en algún punto de la vida: ¿Qué finalidad tiene la vida? Y la respuesta es ninguna. La vida no tiene ninguna finalidad.
Nosotros vivimos en función de un objetivo, pero esto es una cuestión de la mente. La mente siempre tiene un objetivo. Pero el objetivo no es importante, lo importante es hacer bien el viaje. El objetivo es vivir en el futuro. Tú renuncias al presente porque estás obsesionado con el futuro, con el objetivo. Pero ¿has notado que cuando logras a este objetivo te sientes un poquito raro? Después de un tiempo sientes un vacío, necesitas otro objetivo.