Todos poseemos el poder de la palabra en lo que decimos o pedimos. Las palabras tienen un poder infinito y puede materializarse para ganar el juego de la vida.
La autora de este libro nos enseña que lo que pensamos, creemos y deseamos tarde o temprano se materializa y se convierte en una realidad, nuestro subconsciente es una energía que materializa, es Dios que está en nosotros.

"El hombre tiene el poder de cambiar una condición desfavorable agitando la varita mágica de sus palabras"