La precisión de la Grande Maison se refleja en el nuevo Duometre, que, con el calibre 391 patentado totalmente renovado, Jaeger-LeCoultre ha presentado en Watches & Wonders. Es un cronógrafo monopulsador de cuerda manual capaz de medir hasta un sexto de segundo, fases de Luna e indicación día/noche además de la indicación de las 50 horas de reserva de marcha de cada uno de los dos barriletes que nutren el mecanismo.
Dos barriletes y dossuperar el desafío que suponía mantener el isocronismo del reloj y por tanto su precisión, mientras el muelle motor tenía que alimentar también las complicaciones añadidas al mecanismo.
