iploma olímpico en Tokyo 2020 y cuatro veces subcampeona del mundo, Antía Jácome (Pontevedra, 1999) se consolida ya como una de las grandes atletas españolas y busca alcanzar el podio en los Juegos Olímpicos de París 2024. La gallega encandila por su seguridad en la canoa y su estilo en esta colección cápsula creada por Dior. Siempre será mi casa. Es donde empecé este amor que tengo por el piragüismo y por la Fue con 12 años. Acompañaba todos los años a mi padre a cruzar una de las playas de Pontevedra y en una ocasión decidimos hacerlo con una canoa autovaciable, y desde ese momento me enamoró. Sentirme bien. Sentirme bonita, cómoda y ser yo misma. Antes pensaba que era una manera de encubrir los complejos, pero me di cuenta de que no. Al final yo me visto y maquillo conforme a lo que me gusta y lo que busco cuando me preparo para salir es sentirme feliz conmigo misma. Me siento muy identificada con esta nueva colección porque realza nuestra figura como deportistas y es un orgullo enorme poder vestir estas prendas de la colección que ha creado la casa Dior con motivo de la celebración de los Juegos Olímpicos de París 2024. Creo que el miedo es algo que tenemos en la cabeza y es una cosa que hay que superar. Es verdad que tenemos respeto a las competiciones y a la incertidumbre, la preocupación de una posible lesión, pero no llega a ser miedo como tal. He estado sola en muchos momentos, pero nunca me he sentido sola. Siempre he estado acompañada de mi familia y de mis amigos; aunque fuese en la distancia se han preocupado por mí y tengo mucha suerte de poder contar con ellos para todo. Estoy muy feliz y muy ilusionada, quedan muy pocos meses y estoy tranquila. Ha sido una preparación muy bonita, llena de cambios que me han ilusionado mucho y han sacado mi mejor versión. Tengo muchas ganas de representar a España por segunda vez en unos Juegos Olímpicos. Es un orgullo enorme. Tenemos una relación muy buena desde que nos conocimos. Hemos coincidido en muchas cosas, compartido muchos momentos; somos dos personas que pensábamos que éramos muy diferentes pero en realidad somos muy parecidas, nos complementamos y nos aportamos mucho la una a la otra. Tenemos un objetivo en común, que es conseguir una medalla en los Juegos Olímpicos. Las dos tenemos tantas ganas de conseguirlo que eso se nota en nuestro trabajo juntas. Entrenamos separadas, ella en Aranjuez y yo en Mallorca, pero hacemos todo lo posible por juntarnos todo lo posible porque necesitamos sacar sesiones juntas y lo estamos llevando muy bien. Sabemos que el objetivo es muy ambicioso y que hay que trabajar mucho para poder conseguirlo. El mayor aprendizaje fue relativizar los problemas porque a veces magnificamos lo que nos sucede. Valorar lo que tenemos es muy importante para ser felices y este viaje me ayudó mucho a ser consciente de ello. Fue un orgullo y una experiencia única ser la pionera de la canoa en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 representando a España. Para mí, el feminismo es la igualdad entre hombres y mujeres, y yo creo que recibimos un apoyo incondicional por parte de la Federación y de la gente que hace que nuestro deporte sea igualitario.
