Se trata de un melodrama que describe la jornada de dos pícaros: Jacinto (Antonio Vico) y su sobrino Pepote (Pablito Calvo), inmersos en una carrera contrarreloj para conseguir a lo largo de una jornada las 300 pesetas que Jacinto necesita para alquilar un traje de luces para la corrida nocturna que supondrá su regreso a los ruedos.
Dirigido por Ladislao Vajda, el filme tradicionalmente se ha relacionado con (1948) y el neorrealismo– Calvo ocupa literalmente la mitad del metraje.