A demás de dedicarle la crítica de rigor, este mes hemos querido profundizar en algunos de los aspectos más llamativos del recién lanzado The Last of Us: Parte II Remastered, de la mano de Matthew Gallant, su director.
¿Por qué introducir un modo roguelike? ¿Fue complicado hacerlo?
En los últimos: uno de ellos es que hay mucho en juego. En el modo historia, hay checkpoints, pero, en un roguelike, la sensación es diferente, pues sabes que te estás jugando la ronda, con todo el progreso que has hecho con ese personaje. El otro elemento que me encanta de la estructura roguelike es que vas a morir (ríe). Incluso aunque ganes, podemos generar otra combinación aleatoria de cosas a las que enfrentarte.