La mayoría de la población sabemos qué es la dermatitis atópica. La asociamos con una piel más seca, que pica y con la aparición de eccemas que hacen que los niños se rasquen. Lo que no sabemos es el impacto en la calidad de vida de estos pacientes. Aunque no se trate de una afección que ponga en peligro su vida, sí genera un gran golpe emocional en su día a día, llegando a ser la causa de problemas escolares, conductuales, depresión y ansiedad.
■ ¿Qué es la dermatitis atópica?
Es una enfermedad crónica de la piel que afecta a entre el 15 y el 20 % de la población infantil en España. La lesión característica de esta patología es el eccema y provoca prurito (picor),tar a la calidad de vida del niño. Otros síntomas de la dermatitis atópica son piel seca, manchas de color rojo, especialmente, en manos, pies, tobillos, parte superior del pecho, párpados, parte interna de los codos y las rodillas y, sobre todo en los bebés, en el rostro y el cuero cabelludo. También, pueden aparecer pequeñas protuberancias que pueden supurar y, del rascado, la piel puede inflamarse e, incluso, quedarse en carne viva.