La poda sináptica es un fenómeno aparentemente natural, aunque no hay consenso en si en realidad podría evitarse, y es un defecto en la educación mental de los niños.
Al parecer hay dos grandes podas sinápticas: una se da en la niñez y otra en la adolescencia. El cerebro del niño, en sus primeros años de desarrollo, crea trillones de conexiones neuronales, hasta el punto de que se dice que está sobrecargado.