EL ÁNGEL OSCURO

omo la mayoría de los teólogos dejaron de trabajar con los ángeles para centrarse en temas más grandes, considerando que se habían convertido en algo irrelevante para el mundo, de 1920, cuyo elemento principal tiene una forma fantasmagórica e inquietante. Su cara cilíndrica, enmarcada por sus orejas geométricas y una curiosa cabellera llena de rizos, y que se distingue solo por sus dientes salidos y sus mejillas flácidas, reside sobre un cuerpo frágil, completado con unos pies de pollo y unas piernas larguiruchas. Incluso sus alas, grandes en proporción, parecen enredadas y de algún modo inadecuadas. Una explicación podría ser que Klee (1879-1940) quería señalar la irrelevancia de los ángeles en la época moderna, pero no podía tener más razón. Según creían sus más fervientes admiradores, este ángel era su modo de darle sentido al mundo. Es una obra que siguió a la Primera Guerra Mundial (donde Klee sirvió en el Ejército alemán y vio cómo mataban a amigos suyos) y anticipó la siguiente. Klee sufrió bajo el régimen de los nazis, quienes le etiquetaron como artista «degenerado» y cerraron la escuela Bauhaus en Weimar, a principios de la década de 1930, donde Klee enseñaba, y tuvo que irse a su Suiza natal, donde se le denegó la ciudadanía hasta su muerte, en 1940. ¿Quería Klee expresar con su ángel poco angélico la corrupción y el abuso hacia todo lo que fue querido en la historia del mundo durante las primeras décadas del siglo XX?