Si hubiese que hacer una lista de fenómenos en el sector del podcast durante el último año, La Pija y la Quinqui estaría en los primeros puestos. Y eso que la idea nació sin muchas pretensiones, con una cocina de fondo y un equipo de andar por casa.
La culpa la tuvo Carlos Peguer, quien se hartó de escuchar programas después de la pandemia y le dijo a su amiga Mariang (sí, terminado en g): “¡Oye, vamos a montar algo juntos!”. Y este es el resultado: Rosalía presentando disco con ellos, millones de visitas e interrupciones en cada terraza de bar para decirles: “¡Buah! Me encanta se sienta en su plató para hablar de meritocracia, fama y salud mental.