ENIGMAS SIN RESOLVER
En 1994, Emmanuel Anati, arqueólogo florentino que se conoce el desierto del Néguev como la palma de su mano, descubrió una serie de geoglifos en Har Karkom, la Montaña del Azafrán, en el suroestede Israel. Anati es de los que cree que esa montaña podría corresponder ai monte Sinaí de la Biblia, si bien las evidencias para sostener su teoría son bastante laxas. Lo cierto es que, sobrevolando el área, reconoció varias líneas, formas abstractas y figuras de cuadrúpedos de gran tamaño, alguna de más de treinta metros de largo.