EL VENENO, COMO MÉTODO UTILIZADO PARA OCA- SIONAR LA MUERTE DE UNA PERSONA, HA SIDO CONSIDERADO A LO LARGO DE LA HISTORIA COMO UN PROCEDIMIENTO REPROCHABLE POR LA CO-BARDÍA Y PREMEDITACIÓN DE QUIEN LO EMPLEA, CONTRA EL QUE NO CABE DEFENSA. ES LA MÁS CO-BARDE DE LAS ALEVOSÍAS.
Una sentencia que cambió la definición de veneno fue la del caso de la española Pelegrina Montuis, a finales del siglo XIX. Hasta entonces se definía al veneno como sustancia con una estructura químicamente concreta que, introducida en el organismo interacciona con el mismo pudiendo pro- ducir efectos adversos incluida la muerte. Para el Tribunal Supremo, a partir de esa fecha, “veneno es toda sustancia que introducida en el organismo puede causar la muerte o graves trastornos, no importa que su actuación sea química o mecánica, pertenezca al mundo animal, mineral o vegetal, admitiéndose que puede ser administrado por cualquier vía”.
Pero esta definición sirve también para tóxico,