Selección Clio

AUSTRALIA LA CONQUISTA ESPAÑOLA

APARTIR DE 1492 TODO EL ESFUERZO DESCUBRIDOR-COLONIZADOR SE CENTRÓ EN EL NUEVO CONTINENTE, AMÉRICA, PERO NO HAY QUE OLVIDAR QUE PROSIGUIERON LOS ESFUERZOS EN CONSUMAR EL PROYECTO ORIGINAL COLOM-BINO: LLEGAR A ORIENTE (CHINA-CATAY) POR OCCIDENTE. Siguiendo la idea matriz de Colón otras expediciones españolas se embarcaron en descubrir un paso hacia Oriente, y ahí estriba la importancia máxima del descubrimiento de la Mar del Sur (Océano Pacífico) por parte de las huestes de Vasco Núñez de Balboa. La inmensidad azul de un ignoto océano se abría ante los expedicionarios españoles que poco tardaron en surcar sus aguas abriendo nuevas rutas a la exploración.

EL LAGO ESPAÑOL

Después de este primer viaje al Pacífico parece que se abrió la veda para nuevas expediciones que consolidaran las rutas existentes. En el discurrir del siglo XVI portugueses y españoles eran los únicos concursantes de esta peculiar carrera. En 1525 se organizó una gran expedición con el objetivo de seguir la misma ruta que llevó a cabo Magallanes con el objetivo de someter las Molucas, archipiélago que quedaba en el mismo centro de la rivalidad comercial de los dos pueblos ibéricos. Se armaron y pertrecharon siete naves que desplazaban más de 1.000 Tms al mando del comendador de la Orden de San Juan, García Jofre de Loaysa, y Juan Sebastián Elcano capitaneaba una de las naos y ostentaba el título de piloto mayor de la flota. Meses después de la partida cayó víctima del escorbuto y su cuerpo fue arrojado al mar, quizás la más digna sepultura para uno de los más grandes navegantes de todas las épocas.

Las naves de Loaysa corrieron distinta suerte puesto que solo una, la capitana Santa María de la Victoria, arribó a las Molucas. El resto corrieron desigual suerte: la carabela Santa María del Parral llegó a Mindanao (Filipinas), el patache Santiago –separado de la flota principal– puso rumbo a México y llegó al golfo de Tehuantepec; y la carabela San Lesmes es la que más dudas ha despertado, ya que su paredero es un miterio, ya que se han barajado, al efecto, multitud de hipótesis. Desde que naufragó en una de las islas de las Marquesas hasta que se perdió en el archipiélago de Tuamotu o encalló en el atolón de Amanu.

El caso en 1527, quien perdió dos de sus tres barcos en las proximidades de las islas Marianas. Pocos años después del desconcertante final de la carabela San Lesmes a miles de kilómetros se decidía quienes serían los dominadores de las islas del Pacífico mediante el Tratado de Zaragoza (1529). El emperador  prefirió no tener problemas con los portugueses y renunció mediante este tratado a todos sus derechos sobre las Molucas en favor de Portugal. España concentró, a partir de entonces, sus esfuerzos en colonizar las islas y tierras que se descubriesen al Este de las Molucas. Inconscientemente, por el momento, desde el punto de vista geográfico, el tratado firmado abría la posibilidad a España de descubrir y colonizar islas como Nueva Guinea, Tasmania, Nueva Zelanda o la mismísima Australia.

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