El cristianismo dejó de ser perseguido después de que el emperador romano Constantino el Grande (272-337) promulgara el Edicto de Milán (313), que permitía la tolerancia religiosa. Después, sería el emperador Teodosio I (347-395) quien, mediante el Edicto de Tesalónica (380), elevaba el cristianismo a categoría de religión oficial… pero también decretaba la persecución de los paganos.
DE RELIGIÓN PERSEGUIDA… A RELIGIÓN OFICIAL
La institucionalización del cristianismo por el Imperio romano hizo confluir dos esferas: la política y la religiosa. Por un lado, las incipientes estructuras de la Iglesia emularon la misma organización burocrática del Imperio. Si en Roma la unidad administrativa, con cierto grado de autonomía, lo constituía el civitas o ciudad, la Iglesia superpuso en ella la figura del obispo (episcopus o episkopoi, que se traduce como “vigilante”). El obispo, asistido por sacerdotes (presbiteroi) y diáconos (servidores), ejercía su autoridad en la civitas, que sería conocida como diócesis. Varias diócesis constituían una provincia eclesiástica administrada por un metropolitano o arzobispo. Este tenía autoridad de convocar a los obispos de su provincia en una asamblea o sínodo (que en griego se traduciría como “caminar juntos”) para establecer criterios comunes acerca de determinadas cuestiones doctrinales o de moral. Mientras que, a través de circunscripciones territoriales más pequeñas como las parroquias (a cargo de sacerdotes), cada diócesis extendía su área de influencia alcanzando zonas rurales (pagus), en las que se conservaba una mayor influen-cia de los cultos precristianos (de ahí que, a partir del siglo V, estos cultos fueran conocidos como paganos, palabra que deriva de rural o campesino).
En la civitas, los obispos de la Iglesia no solo ostentaban una autoridad religiosa, sino que – tal y como se refrendaba en el Codex Theosianus (438) de (401-450)– también podían ejercer su tutela en ciertos ámbitos jurídicos, como el que se refería al Derecho de familia. Este poder político de los obispos se vio