Los otros superhéroes

Comenzamos rindiendo merecido homenaje a los 3 Supermen, una coproducción de países europeos, que sin tener más superpoderes que sus espectaculares habilidades como atletas y un traje antibalas de un rojo chillón no contaban con el apoyo de los efectos visuales para simular sus poderes, sirviéndose sus protagonistas de su habilidad como dobles de acción y acróbatas. El ciclo de películas se inició con 3 Superhombres y prosiguió con 3 superhombres en Tokio (1968), Los 3 supermen en la selva (1970), Los 3 superhombres en el Oeste (1973), Hong-Kong, 3 Supermen, desafío al kung-fu (1973), Las amazonas contra los supermen (1974), Los 3 supermanes contra el padrino (1979) y 3 Superman en Sto. Domingo (1986).

En esta primera aventura el Superman coprotagonista fue el doble de acción Aldo Canti, un ladrón en la vida real que estaba además vinculado con la mafia, pero al que las autoridades le dieron un permiso para salir de prisión con el fin de hacer sus espectaculares acrobacias en este este largometraje en un papel que posteriormente heredó el también acróbata Sal Borgese, contrapunto cómico del grupo en el papel del Superman mudo. Canti firmó una de las acrobacias más espectaculares de la saga en esta primera entrega, saltando desde una ventana de seis metros a un trampolín para propulsarse en un segundo salto a un camión en movimiento.

Otros pioneros en la anticipación de claves del cine de superhéroes fueron los luchadores enmascarados mexicanos, avanzados en la fórmula de alianza o cruce de personajes aplicada en Santo, el Enmascarado de plata y Blue Demon contra los monstruos, superhéroes cercanos para el público en las sesiones continuas de dos películas de los cines de barrio de los años sesenta y setenta a través de un ciclo de películas en el que también destacan Santo contra las mujeres vampiro (1962), Santo contra los zombis (1962), Santo en el Museo de Cera (1963), Santo contra la invasión de los marcianos (1967), (1971), (1972), (1972) o (1973).