Dos altos dignatarios aparecen retratados de frente mirando hacia el espectador. Uno de ellos es obispo y embajador francés ante el Sacro Imperio y el otro embajador francés en la Corte inglesa; ambos, amigos. Su cargo se identifica por sus vestiduras: traje corto para el embajador laico, manto largo para el del clero.
Una de