Dos editoras de belleza *investigan*.
LOS DEDOS SON TODO
Ruby Buddemeyer EDITORA DE BELLEZA US
Aunque la belleza es literalmente mi trabajo, el maquillaje no es realmente lo mío. Claro, me emociono tanto como nadie con una paleta de sombras de ojos bastante nueva, pero mi rutina personal es… ¡ni) y debes comprar siempre unas nuevas o ponerte el maquillaje de meses por toda la cara. Además, ya tengo, de forma gratuita y de por vida, algo que hace un mejor trabajo. Mi dedo anular tiene el tamaño perfecto para aplicarme el o el corrector en mis granos. De hecho, el calor de mi piel facilita el paso “difuminar”; juro que los resultados se ven más naturales. Quizá sea floja o una genio, no lo sé, pero #TeamNoTools me ha funcionado increíble, así que me quedo con eso.