EL MISTERIO DE SU MUERTE
La mañana del 1º de junio de 1926, en Los Ángeles, California, nació Norma Jeane Mortenson, futura estrella de Hollywood y quien se convertiría en el máximo símbolo sexual del siglo XX: Marilyn Monroe. Su madre, Gladys, sufría de esquizofrenia paranoide y su familia estaba marcada por el estigma de la locura.
Antes de dar a luz a la pequeña Norma, Gladys se había casado con John Baker y tuvieron dos hijos: Jack y Berniece. En 1923 se divorciaron y los niños quedaron bajo la custodia de John. Más tarde Gladys tuvo segundas nupcias con Martin Edward Mortenson, pero ella inició una relación extramarital con Stanley Gifford. Cuando Gladys comenzó a acosarlo, él se fue y ella regresó a su hogar, el cual había abandonado, pensando encontrar consuelo en su esposo, pero Mortenson se había marchado dejándole una nota: “Estoy cansado de soportarte, Gladys. ¡Adiós para siempre!”.
Fue así como el amante y el esposo la abandonaron el mismo día. Y esa tarde su médico le confirmó que estaba embarazada. Ella no sabía quién era el padre. Así que cuando nació Norma Jeane, Gladys dijo desesperada:
—¡No sé criar hijos!
Y entregó la bebé a Ida Bolender, una mujer que solía pegarle a la niña.
Un día, Della, la abuela de Norma Jeane, se robó a la chiquita e intentó estrangularla. Norma se defendió como pudo. Después Della murió de manera
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos