Se puede jugar con él, modificar sus colores y combinaciones, siempre conservando en gran medida la esencia: un estilo estricto, teñido de rosa y con la nostalgia de los universitarios de mediados de siglo, propio de hombres a cuyos nombres les fueron añadidos números romanos. Pero la- sigue siendo un elemento básico de la moda masculina incluso fuera de Estados Unidos: los Oxfords abotonados, las rayas llamativas, las camisas de rugby, los mocasines y los pantalones chinos son clásicos, y lo serán siempre. Pero la Sagrada Escritura inscrita en Harvard, Yale y el resto, enfrenta desafíos. La chamarra universitaria se escapa del molde.
El futuro del prep
Mar 04, 2022
2 minutos
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