1931 fue un año decisivo tanto para Jaeger-LeCoultre como para la relojería en general. Ese año se presenta el Reverso, un reloj que gira sobre sí mismo y que rápidamente se convierte en un icono no sólo de la marca, sino de la propia historia de la relojería universal.
Ahora, cuando se cumplen 90 años de su lanzamiento, Jaeger-LeCoultre le dedica en Paris