EL BENEFICIO DE HABLAR POR HABLAR
encerrados con nuestra familia, nuestra pareja o solos el pasado año. Si bien eso supuso una falta total de soledad para algunos de nosotros (y un exceso de ella para otros), la cuarentena también se tradujo en la desaparición de algo que no teníamos ni idea que necesitábamos tanto: esos encuentros casuales y esporádicos con otras personas. La ciencia nos ha demostrado que todas esas conversaciones fugaces y efímeras con el frutero o el amigo de un amigo son realmente importantes para nosotros. Estos intercambios son capaces de
