Rocío Carrasco: el accidente que lo cambió todo
A MEDIDA que vamos conociendo su historia, su verdad, duele más escucharla. Y es que cada episodio de la docuserie de Rocío Carrasco (43) remueve las entrañas. Si creíamos imposible que hubiera algo más doloroso que dar por perdido el amor de unos hijos, sus últimas declaraciones han conseguido ahondar más en la herida descubriendo que Rocío sigue guardando muy dentro de su corazón amargura, decepción y, aunque duela hasta decirlo, cierto rencor hacia sus padres.
Ya habíamos oído en los episodios anteriores a Rocío manifestar que Antonio David tenía atemorizada a su madre, Rocío Jurado, ya que esta tenía pavor a los escándalos. También la escuchamos relatar el bofetón que su padre le propinó cuando le comunicó que estaba embarazada y cómo su relación con él mientras vivió
