Los tesoros de LA VID
En un momento en el que todas las firmas de belleza se esfuerzan por colgarse la etiqueta Mathilde Thomas, fundadora de Caudalie, puede presumir de haberlo hecho primero. Y, es más, lo hizo tan pronto que incluso llegó a sentirse una en más de una ocasión. «Cuando lanzamos Caudalie en 1995 la gran tendencia eran los productos con colágeno, así que una marca con activos antioxidantes de la vid no resultaba muy sugerente. Recuerdo una conferencia de prensa en 2007 en Nueva York en la que expliqué que había retirado de mis productos parabenos, fenoxietanol, ftalatos, aceites minerales e ingredientes de origen animal y nadie parecía muy interesado. ¡Y ahora tenemos un éxito enorme en California!», nos cuenta vía Zoom desde su oficina parisina. La creadora se encuentra inmersa en un reto colosal: la reinvención de todas las referencias de la casa tanto en cuanto a como a composición. ¿El objetivo? Convertirse en una marca (cero residuos), una transformación que ha aprovechado para que sus fórmulas sean todavía más efectivas, limpias y naturales.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos