La esencia humana
Apenas tenía siete años cuando su profesora le mostró, por primera vez, un lápiz de «Yo estaba hecha de carne, pero mi piel era marrón y oía que la gente decía que yo era negra. Imagínate qué lío de colores tenía en la cabeza», recuerda Angélica Dass (Río de Janeiro, 1979), quien nació(): un proyecto fotográfico en continuo movimiento que destaca los verdaderos colores de la humanidad y lucha contra la discriminación. Lleva más de 4.000 retratos compilados en cinco continentes, todos con el mismo formato y cada uno acompañado en su parte inferior de unos dígitos que se corresponden con el código preciso de las guías Pantone. Su infinita iniciativa sobre la que otros se miran, se identifican, reflexionan y debaten ha estado presente en diferentes escenarios: desde la sede de la Unesco en París hasta el Foro Económico Mundial de Davos, pasando por colegios, foros científicos, la portada de la revista y las charlas TED.
