EL PRECIO DE LA LIBERTAD
Todos experimentamos en mayor o menor medida la sensación de inseguridad, nos pasa al transitar por una zona peligrosa o desconocida en nuestra ciudad, o al exponer un punto de vista diferente al de las personas y/o gobiernos que nos rigen, al estar inmersos en una relación violenta, también cuando el hambre o complicaciones sanitarias acercan la palabra muerte a nuestro vocabulario. Sin embargo, la gran mayoría de las veces, estas situaciones se pueden evitar o controlar al tomar las decisiones adecuadas. En el mundo hay gente que necesita cambiar de país de residencia y, en ocasiones, hasta de identidad para salvaguardar su vida y encontrar apoyo en el derecho internacional y las Naciones Unidas.
SITUACIONES DIFERENTES, MISMAS SOLUCIONES
Existe una enorme diferencia entre un refugiado y un asilado político. En la primera situación es un grupo específico de personas que se encuentra bajo protección del derecho internacional, ya que la situación en su país de origen les imposibilita el regreso a sus
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