Patinaje artístico
una vez. Sitios del mundo tan recónditos, de los que solo vemos por televisión y en fotos, en los que la vida no tiene nada que ver con lo que conocemos. Imaginad cómo sería vivir en un sitio donde la nieve cubre las calles y los tejados más de 200 días al año. Un sitio donde los carritos de las compra llevan esquís, donde todos los vehículos llevan clavos en las ruedas y parrillas de faros. Así es Advirsjaur. Una población de apenas 4.000 personas, al sur del Círculo Polar Ártico, y todo un parque de atracciones para los que nos gusta conducir. Ya desde el avión, solo se ven pinos y suelo blanco, pero también lagos inmensos helados donde puedes distinguir trazados de curvas. “Si yo viviese aquí, estaría todo el día derrapando en un lago con el coche”. Es la frase que más repetíamos los compañeros que tuvimos la inmensa suerte de ir allí. Y es que Audi tiene un centro de pruebas en el que poner al límite todas las prestaciones
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