Maureen O'Sullivan
Nacida el 17 de mayo de 1911 en Boyne, County Roscommon, Irlanda, y fallecida víctima de complicaciones derivadas de una intervención de cirugía cardíaca, el 23 de junio de 1998 en Scottsdale, Arizona, Estados Unidos, Maureen Paula O’Sullivan es recordada por los cinéfilos sobre todo por su trabajo interpretando el papel de Jane Parker en el ciclo de películas de Tarzán de los monos en las que el rey de la selva creado por Edgar Rice Burroughs fue interpretado por Johnny Weissmüller.
Sin duda ese papel fue el que marcó su desarrollo como estrella, aunque, a lo largo de su dilatada carrera –acumula más de cien entradas de trabajos para cine y televisión en su filmografía–, esta actriz irlandesa llegó a desempeñar una más amplia galería de personajes tras ser descubierta por el director Frank Borzage y conseguir su primer éxito en la pantalla grande a principios de los años treinta interpretando la comedia fantástica Un yanqui en la corte del rey Arturo (1931), protagonizada por el cómico Will Rogers, donde competía con otra fémina destacada del Hollywood de la época, Myrna Loy, fichada para dar vida a la reina Morgana le Fay.
Maureen era hija de Evangeline “Mary Eva” Lovatt Frazer y Charles Joseph O’Sullivan, oficial de los Rangers de Connaught, un regimiento de infantería del Ejército británico con el que luchó en la Primera Guerra Mundial. Educada en un colegio de monjas, Maureen pasó la infancia estudiando en la escuela del Convento del Sagrado Corazón de Roehampton, donde tuvo como compañera de clase a otra futura estrella de Hollywood, Vivien Leigh, quien en aquel momento respondía por el nombre de Vivian Mary Hartley.
Pebutante en las películas habladas
Descendiente de irlandeses, ingleses y escoceses, Maureen completó sus estudios en Londres y en París antes de regresar a Dublín para trabajar atendiendo a los pobres. Como hemos dicho, fue Frank Borzage, ganador de dos Oscar por su trabajo como director en El séptimo cielo, de 1927, y Bad Girl, de 1931, quien, en su paso por Dublín para rodar la película La canción de mi alma (1930), ofició como descubridor de la actriz.
Maureen había pensado en ser actriz desde que estudiaba en la escuela, y cuando se encontró con Borzage contando 18 años, no desaprovechó la ocasión que este le brindaba en principio para aparecer como extra, aunque después de hacer una prueba ante la
