Entre el Carnegie Hall y el Sónar
May 01, 2019
4 minutos
Por Jesús Rodríguez Lenin
Fotografía Jordi Bartalot
SUELE SER HABITUAL que las casas de los músicos sean un pandemonio de instrumentos y discos esparcidos por doquier. No lo es tanto que los espacios sean amplios y semivacíos, expresión del “menos es más” de Mies van der Rohe. Así es la casa de Francesco Tristano Schlimé (Luxemburgo, 1981) en el barrio barcelonés de Sants: un paralelepípedo de dos plantas situado a espaldas de la estación del AVE, exento de ornato, en donde se respira orden, mesura y silencio. Vive ahí con su mujer (Ruth, española, del pueblo oscense de Fraga) y sus dos hijos pequeños, que se encuentran en la escuela. Cómo hace para
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