TAN LEJOS TAN CERCA
EN LA PARTE MÁS ELEVADA de las terrazas del Parque Natural de la Serralada de Marina se ve con claridad el skyline de Barcelona. "Se nota que hace buen día", dice Valérie Veilleux alegremente mientras descorcha la botella de uno de los cavas que se producen en las bodegas ecológicas Alta Alella. Concretamente, el Mirgin Opus y el Mirgin Exeo lo obtienen de las cepas que crecen en la zona más baja del terreno, reconocido como "paraje calificado Vallcirera", informa la improvisada anfitriona antes de dar un sorbo y volver la vista al frente para señalar donde se junta el cielo con el Mar Mediterráneo.
Josep María Pujol-Busquets y la añada", cuenta Pujol-Busquets. El enólogo ha recuperado cepas de más de 60 años y plantado las variedades tradicionales Pansa Blanca y Mataró. Su sueño es desarrollar uvas autóctonas –como la Xarel-lo, la Macabeo o la Parellada– que sean resistentes a las plagas. "Nuestra intención es eliminar todos los tratamientos para lograr vinos más puros", explica del proyecto en el que están volcados desde hace más de un lustro.
