LA CONQUISTADORA
Tokio era el nombre de la ciudad que alberga una cultura milenaria hasta que apareció ella y cambió las pagodas por el mameluco rojo. Ursula Corberó no es solo el emergente de un suceso global como La casa de papel. Desenfadada, natural, temeraria y voraz, se aventura en todos los registros actorales. Y los aprueba. Retrato de una actriz que se anima a todo; incluso, a la sinceridad.
La tercera temporada de La casa de papel presenta las consecuencias indeseadas que les trajo a Tokio y a su grupo estar sin sus máscaras y ser reconocidos por la gente. Haciendo un paralelismo con la serie y su éxito mundial, ¿cómo lidiás con semejante exposición?
No te voy a engañar, al principio fue un tanto desconcertante, para todos creo, porque no lo esperábamos. Nosotros habíamos estrenado la serie en Antena 3 y había funcionado bien, hasta ahí. Para
