Descubre este podcast y mucho más

Los podcasts se pueden disfrutar de forma gratuita sin necesidad de una suscripción. También ofrecemos libros electrónicos, audiolibros y mucho más por solo $11.99 al mes.

No disponible«Sólo quedaban tres»
No disponible actualmente

«Sólo quedaban tres»

DeUn Mensaje a la Conciencia


No disponible actualmente

«Sólo quedaban tres»

DeUn Mensaje a la Conciencia

valoraciones:
Longitud:
4 minutos
Publicado:
1 may 2024
Formato:
Episodio de podcast

Descripción

(Víspera del Natalicio de Juan Bueno)
«Era una noche de lluvia constante.... Corrían los primeros días de agosto de 1962.... El pastor Juan Bueno, que ya llevaba unos siete meses en El Salvador... detuvo su auto frente al semáforo en rojo cerca de una estación de gasolina.... Miró su reloj. Eran las 11 de la noche con 34 minutos....
»En una esquina... divisó a un niño de unos cinco o seis años, tratando de protegerse de la lluvia bajo un trozo de techo. Su delgada figurita se encogía al lado de una pila de periódicos, tapados con un pedazo de plástico asegurado al piso con pequeñas piedras de regular tamaño. Así evitaba que la lluvia y el viento estropearan los diarios. Cuando el semáforo cambió de color, el pastor Juan Bueno detuvo su automóvil frente al niño. Bajó la ventanilla a pesar de la lluvia.
  »—¿Qué haces a esta hora aquí? ¿Por qué no estás en tu casa? —preguntó casi a gritos... observando al niño que, aunque trataba de cubrirse bajo el techito, se notaba que el frío le calaba los huesos. Apenas se cubría con una raída camiseta. Parecía que lo único que le importaba [era] que no se mojaran los periódicos o que el viento se los llevara.
»—No me puedo ir hasta que venda el último. Ya sólo me quedan tres.
»—Pronto va a salir el periódico de mañana. ¿Qué vas a hacer si no los vendes?
»—Mi mamá se va a enojar conmigo —[respondió, poniendo] cara de aflicción el menor.
»—Dame los tres periódicos.
»—Pero todos son de hoy.
»—No importa.
»El niño, [con] cara de incrédulo, entregó los tres últimos ejemplares y recibió el dinero, y luego dibujó en su rostro una enorme sonrisa. Cuando el pastor Bueno se retiraba... se le estrujó el corazón [al ver] por el [espejo] retrovisor al niño que daba saltos de alegría. ¡Ya no le importaba mojarse!»
Así cuentan los escritores Marvin Galeas y Carlos Clará la historia detrás del título de su libro Sólo quedaban tres, que es a su vez la historia del comienzo de los Liceos Cristianos en la República de El Salvador. Es que, según explican los autores salvadoreños, «en el fondo de su ser Juan Bueno sabía que había hecho feliz a un niño por un día, pero que a la mañana siguiente todo sería igual o peor, y no sólo para [ese] niño sino para miles de niños en El Salvador.... [Así] el círculo de la pobreza nunca se rompería....
»[En cambio,] si niños como [aquel] pudieran recibir una educación cristiana desde los primeros años hasta ver coronados sus estudios, sus vidas no sólo cambiarían por una noche; podrían cambiar de manera sustancial y duradera, y a su vez ayudar a otros niños.... “¿Qué [tal] si fundamos un colegio cristiano para darles oportunidad a niños como el vendedor de periódicos de recibir una educación de calidad y cristiana?” [se] preguntó.»1
Gracias a Dios y a los esfuerzos de Juan Bueno y su esposa Loida, más de sesenta años después habría como resultado 38 colegios en 9 de los 14 departamentos de la República, y más de medio millón de niños ya habrían pasado por las aulas de los Liceos Cristianos que fundaron... y la cifra sigue en aumento. Es que no se dirá: «¡Misión cumplida!» sino hasta que haya colegios en los cinco departamentos restantes.2
Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net


1
Marvin Galeas y Carlos Clará, Sólo quedaban tres: El encuentro entre el Pastor Bueno y el niño vendedor de periódicos (San Salvador: Editorial Cinco, 2021), pp. 37-39.


2
Ibíd., pp. 47-48; Óscar Orellana, «Reverendo Juan Bueno: 60 años trabajando por la educación de El Salvador», elsalvador.com, 21 junio 2023 En línea 20 noviembre 2023.

Publicado:
1 may 2024
Formato:
Episodio de podcast