Aristóteles no era nomás filósofo, andaba en un montón de disciplinas y hasta inventó unas que todavía no existían. Así de chingón era. Era tan inteligente y tan dedicado que hasta ayudó a clasificar a los animales del mundo (entre otras cosas) porque él decía que para comprender mejor las cosas tenemos que ordenarlas primero. Él se volvío tan importante que por muchísimo tiempo sus enseñanzas no se cuestionaron (aunque fueran algunas veces incorrectas). Él hizo lo mejor que pudo con lo que tenía disponible en su tiempo, pero vaya que ayudó a la humanidad a avanzar mucho. Vente a escuchar esta platiquita y dinos tú que piensas del buen Aristóteles.