Hubo un tiempo en el que ciencias como la Alquimia y la Química, o la Astrología y la Astronomía, iban de la mano. Grandes monarcas como Felipe II ordenaron a astrólogos como Matías Haco que pronosticaran su vida desde su nacimiento. Pero hay más. En la actualidad, las cartas natales de personajes como Stalin o Hitler, parecen revelar aspectos de su existencia con sorprendente acierto. Y es que, como vamos a escuchar en los próximos minutos, la Astrología no es una disciplina que estudian personas con pocos escrúpulos que se quieren llenar los bolsillos a costa de la inocencia de los demás. Hay un fondo muy sólido al que merece la pena echar un vistazo. Iniciamos viaje…