Jesús nos presenta la parábola de un propietario que plató un viñedo, lo rodeó con una cerca, le cavó un lagar, le construyó una torre para el vigilante y luego lo alquiló y se fue de viaje. El propietario tenía la esperanza de que quienes lo habían rentado se pondrían a trabajar para darle buenos frutos. También a nosotros el Señor, desde que fuimos bautizados, nos ha rentado su viña, y espera que pongamos en juego nuestros talentos para darle ese fruto esperado. Hemos sido bendecidos con tantos cuidados de su parte -la Iglesia, la vocación cristiana, los sacramentos, nuestros padres, la formación, la salud…- y vale la pena esforzarnos por poner nuestro máximo esfuerzo por amor, huyendo de la comodidad, buscando que en cada minuto le demos toda la gloria a Dios; que no caigamos en la pereza, madre de todos los vicios, sino que nos ilusionemos por trabajar de verdad con alegría en la viña de Señor.Si deseas recibir el Podcast a diario ingresa a http://www.GodCast.mx y date de alta gratis!