La primera vez que Nelson Albareda promovió un espectáculo en el legendario complejo de entretenimiento Madison Square Garden de Nueva York (no en el arena propiamente dicho, sino en el teatro con capacidad para 5.600 personas que se encuentra debajo) todos le dijeron: “Vas a perder hasta el culo”. Albareda, un cubano nacido en Miami, había reunido lo que para él era un cartel de ensueño: una celebración del 50 aniversario del innovador artista de salsa y cofundador de Fania Records, Johnny Pacheco, con Pacheco y los Fania All-Stars. Aun así, sus detractores tenían razón: Albareda perdió 200.000 dólares en aquel show en el año 2006.
Pero después de que el evento terminó, el promotor seguía entusiasmado. A medianoche, llevó a sus padres, que habían asistido, a una tienda de delicatessen cercana, donde su padre le preguntó: “¿Porque te ríes? ¡acabas de perder 200 mil dólares!.

“Bueno, es parte del negocio”, le dijo Albareda a su padre. "Seguimos avanzando".

Diecisiete años después, Albareda, defiende esa opinión. “En este negocio se pierde dinero, y lo importante no es la rapidez con la que se cae, sino la rapidez con la que se recupera”.

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