La semana pasada un cohete espacial chino generó una alarma internacional porque nadie sabía dónde iba a caer.

Estaba descontrolado después de haber cumplido su misión de llevar un laboratorio a la estación espacial china y algo salió mal en el protocolo de reentrada.

Al final se precipitó en el Pacífico sin causar daños, pero sí afectó al tráfico aéreo y produjo cancelaciones masivas de vuelos, aeropuertos colápsalos, y clientes en tierra durante horas.

No es la primera vez que ocurre algo así. Además de los chinos, los rusos han tenido algún que otro incidente similar.

Entrevistamos a David Barrado Navascués para hablar no solo de este incidente; sino de la cantidad de chatarra espacial que hay orbitando y otros secretos de espionaje entre potencias en los cielos. Escucha el episodio completo en la app de iVoox, o descubre todo el catálogo de iVoox Originals