E. F. Z. La Predicadora

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Efigenia Fernández Zúñiga, mejor conocida como EFI, nació en Apatzingán, Michoacán, México. A la edad de los 15 años trabajó como vendedora de libros en su ciudad natal. Al graduarse como secreta...ver másEfigenia Fernández Zúñiga, mejor conocida como EFI, nació en Apatzingán, Michoacán, México. A la edad de los 15 años trabajó como vendedora de libros en su ciudad natal. Al graduarse como secretaria a los 16 años fue contratada para ser la recepcionista de una imprenta, trabajo que abandonó para convertirse en la secretaria de un periódico local, el cual dejaría después para trasladarse a Morelia, la capital del estado a estudiar la Universidad. Entró a la Facultad de Biología en la Universidad Michoacana, en la que estudió por un año y medio antes de descubrir que no le gustaba atrapar serpientes en el desierto, ni trepar a los pinos para recolectar piñas, Etc., por lo que nuevamente cortó con eso, y se consiguió un trabajo como vendedora de libros en el cual no tardó ni un año antes de alcanzar la posición de Gerente de Ventas al mismo tiempo que estudiaba, ahora en una universidad particular de psicología, en la cual sólo duró un año y medio también. Siendo una persona de mucha oración, pensó que quería dedicarse a orar de tiempo completo, ayudándole así a Jesucristo a salvar almas; por lo que una vez más abandonó todo y se recluyó en un convento. Lamentablemente en el convento descubrió que sólo oraban 3 veces al día, y no todo el día como ella suponía. El momento de los votos llegaba y ella no estaba muy convencida. La superiora general le dijo: Sangre nueva necesitamos hermana, tendrás un tiempo de espera para que lo pienses y vuelvas. En esos días su hermano mayor que vivía en los Estados Unidos llegó a visitar a la mamá y la invitó a acompañarle a los Estados Unidos aunque fuera por un corto tiempo. Ella aceptó y la misma semana que llegó la contrataron a trabajar como cajera en un Restaurante Mexicano ubicado justo frente de donde ella y su hermano vivían. En esa misma semana conoció al que ahora es su esposo y padre de su único hijo de 20 años al momento de publicar este libro. Ella trabaja actualmente medio tiempo en las escuelas primarias de la ciudad donde vive, como asistente substituta de maestra en clases regulares y con niños especiales, además de ser miembro activo del grupo de oración e intercesión de su iglesia.ver menos