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HACE 100 AÑOS
Los seres humanos conocen la tuberculosis desde hace casi 20 000 años, habiéndose detectado su huella en huesos datados en el Neolítico, cuando se domesticaba ganado bovino en África. Existen referencias escritas de hace miles de años, pero sería Hipócrates de Cos, en el siglo V a.C. quien en el libro primero de su Tratado sobre las enfermedades, describe el cuadro clínico de la tisis, caracterizado por los daños pulmonares. Aunque el padre de la medicina supuso erróneamente que se trataba de un mal hereditario, Aristóteles ya habló de la posibilidad de contagio a través de la respiración. En el siglo II, Galeno fue el primero en proponer medidas terapéuticas que incluían el uso de opio como antitusígeno, la dieta y el reposo.
No se registraron grandes, presente en los esputos de enfermos; el agente causante de la enfermedad se llamaría luego en su honor bacilo de Koch.