Fundada en 1937 por Juan Sordo Madaleno, la firma mexicana se creó bajo la premisa de desafiar las normas arquitectónicas convencionales y adoptar una filosofía de diseño progresiva al combinar funcionalidad, estética y conciencia social. Una fórmula que se vuelve tangible en su amplia cartera de proyectos dirigidos a sectores que van más allá de lo residencial y comercial, tocando el sector hotelero, cultural y la planificación urbana. Su capacidad para combinar los conceptos de innovación y comprensión del contexto cultural le han permitido crear estructuras icónicas que resisten el paso del tiempo y marcan época.
Uno de los principales enfoques en la pauta de las creaciones de Sordo Madaleno es el diseño centrado en el ser humano y sus interacciones, priorizando la experiencia por medio de una comprensión intuitiva de cómo habitar los espacios y, a su vez, incorporar prácticas de construcción ecológica y principios de conciencia ambiental. Manteniendo estas bases es que Javier Sordo Madaleno de Haro, quien pertenece a