Gordes, una deslumbrante población en el sur de Francia, en la región de Provenza-Alpes-Costa Azul, se erige en un verdadero tesoro arquitectónico y paisajístico. Sus empedradas callejuelas y casas de piedra, que se elevan majestuosamente sobre una colina rocosa, cautivan a los visitantes con su encanto medieval y sus vistas panorámicas de ensueño. Además, este pintoresco lugar se ha convertido en un auténtico paraíso para los amantes de la lavanda, con sus tiendas y restaurantes que ofrecen productos extraídos de esta fragante flor.
El encanto atemporal de Gordes radica en su estructura medieval, la cual ha resistido el